Por todos son conocidas las riñas y disturbios que se producen alrededor del fútbol en nuestra ciudad, y más específicamente en los alrededores del Estadio Atanasio Girardot. También es claro que se trata de un problema social y cultural de vieja data en donde la afición al deporte es la disculpa para que delincuentes y desadaptados pesquen en río revuelto y ejerzan su violencia a través del color de una camiseta.
La Comunidad de Carlos E. Restrepo, en conjunto con los edificios de Agua Marina, Acacias de Coomeva, Vivaldi y Distrito 65, ha soportado durante las últimas semanas peligrosos enfrentamientos entre aficionados del Atlético Nacional y del Deportivo Independiente Medellín. Riñas con armas de fuego y armas blancas en donde conductores y peatones desprevenidos han quedado en el centro de violentas disputas de jóvenes que se hacen llamar hinchas.
Carlos E. Restrepo es un barrio tradicional y abierto que ha visto como el deterioro social de Medellín lo ha afectado de manera particular: problemas de movilidad, de ruido, de consumo de drogas y ahora tener que presenciar a plena luz del día, en una calle tan concurrida como Colombia, a 6 jóvenes enfrentarse con machetes, es como poco perturbador.
Adicional a estas violentas disputas, algunos habitantes del barrio han sido víctimas de hurto y de agresiones por parte de hinchas o de vándalos que usan las camisetas de los equipos como una manera de camuflarse para delinquir.
Sabemos que el tema de las barras bravas y sus focos de delincuencia son un problema crónico y profundo que requiere de múltiples intervenciones para lograr una solución definitiva o por lo menos sólida. Como ciudadanos de bien que queremos habitar de la mejor manera nuestros barrios solicitamos encarecidamente que la Alcaldía de Medellín haga presencia en estos eventos deportivos y nos brinde la seguridad que necesitamos en el sector.
Este sector le hace un llamado especial a la Alcaldía de Medellín y a sus autoridades para que vigile, acompañe, controle y garantice la seguridad del sector durante las fechas de los diferentes partidos de fútbol que se juegan en el Atanasio Girardot.
GIMM
La Comunidad de Carlos E. Restrepo, en conjunto con los edificios de Agua Marina, Acacias de Coomeva, Vivaldi y Distrito 65, ha soportado durante las últimas semanas peligrosos enfrentamientos entre aficionados del Atlético Nacional y del Deportivo Independiente Medellín. Riñas con armas de fuego y armas blancas en donde conductores y peatones desprevenidos han quedado en el centro de violentas disputas de jóvenes que se hacen llamar hinchas.
Carlos E. Restrepo es un barrio tradicional y abierto que ha visto como el deterioro social de Medellín lo ha afectado de manera particular: problemas de movilidad, de ruido, de consumo de drogas y ahora tener que presenciar a plena luz del día, en una calle tan concurrida como Colombia, a 6 jóvenes enfrentarse con machetes, es como poco perturbador.
Adicional a estas violentas disputas, algunos habitantes del barrio han sido víctimas de hurto y de agresiones por parte de hinchas o de vándalos que usan las camisetas de los equipos como una manera de camuflarse para delinquir.
Sabemos que el tema de las barras bravas y sus focos de delincuencia son un problema crónico y profundo que requiere de múltiples intervenciones para lograr una solución definitiva o por lo menos sólida. Como ciudadanos de bien que queremos habitar de la mejor manera nuestros barrios solicitamos encarecidamente que la Alcaldía de Medellín haga presencia en estos eventos deportivos y nos brinde la seguridad que necesitamos en el sector.
Este sector le hace un llamado especial a la Alcaldía de Medellín y a sus autoridades para que vigile, acompañe, controle y garantice la seguridad del sector durante las fechas de los diferentes partidos de fútbol que se juegan en el Atanasio Girardot.
GIMM
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